En el área de la ciudad de Nueva York son muy populares –y codiciadas– las llamadas residencias ‘brownstone’; así es, esas típicas construcciones habitacionales que vemos en muchas películas y series.
‘Brownstone’ (piedra rojiza), es el material con el que se hacen los elementos decorativos que encontramos en sus fachadas, aunque en realidad lo que impera es el ladrillo. Pues bien, en el barrio de Brooklyn Heights, el despacho de arquitectura e interiorismo, Casa Angulo se encargó de redecorar una de estas residencias.
La intención de Jennifer Paccione Angulo, socia del despacho, fue “modernizar el estilo de la casa, sumando nuevas piezas al arte y los elementos ya existentes”. Darle calidez, frescura y hacer sentir bienvenidos a los visitantes, también era importante para la diseñadora.
Lo primero que notó Angulo es que la decoración de la casa tenía un marcado estilo escandinavo. La interiorista decidió seguir por ese camino. Lo interesante es que optó por un equilibrio entre minimalismo y maximalismo. Para lograrlo, apostó por piezas de Fritz Hansen.
La cama de día “PK80™”, el florero “Ikebana” y lámparas “Kaiser”, son algunas de las nuevas piezas que se agregaron para acentuar el estilo escandinavo. Cada una tiene algo que decir… pero sin acaparar la atención. Otro elemento que notamos y que también viene de la península escandinava es el colchón de la firma sueca Hästens.
Sin duda un proyecto de lo más interesante, que vale la pena conocer, cuando de buscar inspiración se trata.
Tras más de dos décadas de ausencia en la escena neoyorquina, el trabajo del artista mexicano Julio Galán (1958–2006) vuelve a exhibirse en una importante doble muestra presentada por las galerías kurimanzutto y Luhring Augustine en Chelsea. Esta revisión, que abarca casi toda su carrera, es más que una retrospectiva: es una reivindicación de la vigencia de un creador complejo, provocador y profundamente personal, cuya vida y obra se entrelazan hasta volverse inseparables.
Fallecido a los 47 años, Galán dejó un universo visual cargado de simbolismo, melancolía y teatralidad, donde lo autobiográfico se funde con lo fantástico. En sus pinturas y pasteles —poblados por santos, animales parlantes, muñecas rotas y autorretratos disfrazados— el artista exploró temas como la identidad, el género, el deseo y el dolor. Lo hizo con una iconografía que puede parecer cercana al surrealismo, aunque él insistía en que no pintaba sueños, sino su realidad, siguiendo más la estela de Frida Kahlo que la de Breton.
La exposición en Nueva York cobra especial relevancia no solo por su escala y curaduría, sino por devolver al centro del debate a un artista que desafió etiquetas. A menudo encasillado como neomexicano, Galán nunca aceptó límites; se transformaba constantemente, en la pintura y fuera de ella, como si su propia imagen fuera una obra más. En un momento en que el arte contemporáneo revisita los discursos sobre identidad, performatividad y autorrepresentación, su trabajo resulta más pertinente que nunca.
Esta muestra no solo celebra su legado: lo reactiva. Y en ese acto, Galán, el joven que conquistó a Warhol —y a toda una escena— vuelve a estar vivo. Esta exposición no es solo una retrospectiva; es una reactivación de su legado en un contexto que, quizás ahora más que nunca, está listo para entenderlo.
From the Archive | Julio Galán. kurimanzutto y Luhring Augustine en Nueva York, durante todo el mes de abril de 2025.
Desde 1872, Fritz Hansen ha sido sinónimo de elegancia escandinava, calidad excepcional y diseño que trasciende el tiempo. Hoy, su legado sigue más vivo que nunca gracias a piezas que han marcado historia y que continúan dialogando con el presente.
Un ejemplo perfecto es la icónica Silla Swan™, diseñada por Arne Jacobsen en 1958. Con sus líneas curvas y silueta escultórica, esta pieza sigue siendo una declaración de modernidad y confort. Junto a ella, otras creaciones emblemáticas de la marca, como las sillas Grand Prix™, aportan carácter y funcionalidad a cualquier espacio con su estructura ligera y refinada.
En iluminación, la lámpara Caravaggio™ —una creación de Cecilie Manz— ofrece un balance perfecto entre sobriedad y expresión. Su perfil contemporáneo y su luz cálida la convierten en un elemento esencial para atmósferas íntimas y sofisticadas.
La marca también ha sabido responder a las necesidades del presente con propuestas que privilegian la comodidad y la estética. Tal es el caso de los sillones Fri™ y Egg™, pensados para crear rincones de descanso sin renunciar al estilo. En cuanto a mobiliario, mesas como la Analog™ —que celebra la conversación y la interacción humana— y la Join™, con su diseño discreto pero inteligente, revelan el compromiso de la firma por promover una vida bien diseñada.
Fritz Hansen también ha reforzado en años recientes su enfoque en la sustentabilidad, apostando por procesos responsables, materiales reciclables y una filosofía de diseño duradero. Cada pieza no solo responde a una tradición de excelencia artesanal, sino que también mira hacia el futuro, proponiendo un lujo ético y consciente.
En Casa Palacio celebramos la visión de Fritz Hansen: diseño danés que no pasa de moda, que respeta el planeta y que transforma los espacios en entornos atemporales y profundamente humanos. Visítanos para saber más de esta fascinante marca.
En Casa Palacio, la sustentabilidad no es una tendencia: es un compromiso permanente. Sabemos que el buen diseño no solo embellece nuestros espacios, sino que también puede ser un agente de cambio positivo para el planeta. Por ello, apostamos por marcas que integran prácticas responsables en cada etapa de su proceso, desde la elección de materiales hasta la producción y la durabilidad de sus piezas.
En nuestras tiendas, encontrarás firmas que han hecho de la sustentabilidad su sello distintivo. Nanimarquina, por ejemplo, crea alfombras artesanales con tintes naturales y materiales reciclados, minimizando el impacto ambiental. De la misma manera que lo hacen las mexicana Namuh y Jenuina.. Otra marca comprometida es Lind DNA, que reutiliza cuero reciclado para crear elegantes piezas decorativas, combinando diseño contemporáneo con conciencia ecológica.
Creemos en la belleza atemporal como antídoto contra el fast fashion en el hogar. Marcas como Fritz Hansen, con su icónica silla Egg™ y la mesa Analog™, apuestan por muebles diseñados para durar toda la vida, reduciendo así el desperdicio. Por su parte, Herman Miller emplea plásticos reciclados del océano en sillas como la Aeron, demostrando que el diseño innovador y la sustentabilidad pueden ir de la mano.
En el ámbito tecnológico, marcas como Mabe, LG SKS, Smeg y Miele integran soluciones innovadoras para reducir el consumo de energía y agua, contribuyendo a un hogar más eficiente. Muchas de nuestras lámparas, además, incorporan tecnología LED para optimizar el ahorro energético. Corkcicle apuesta por reducir el uso de plásticos desechables con sus termos de acero inoxidable reutilizables. Por su parte, Samsung no solo destaca por la eficiencia de sus televisores, sino también por su enfoque creativo en el empaquetado, aplicando upcycling para transformar sus cajas de cartón en prácticos muebles funcionales.
En Casa Palacio, te invitamos a descubrir cómo el diseño responsable puede transformar tu hogar. Porque elegir bien es cuidar la Tierra. A continuación una lista realizada por nuestros interioristas con productos que tienen una propuesta muy interesante para cuidar al planeta.
Otomano Paris en madera de Jenuina – Los procesos de esta marca, como tintes y trabajo de textiles se hacen de manera responsable con la tierra.
Silla Fibi en piel de Timothy Oulton – La manera en que tiñen sus pieles en con cascara de cafe, lo que asegura un proceso libre de químicos contaminantes.
Cojín decorativo Itzia de Namuh – Los textiles de esta marca utilizan productos naturales libres de químicos.
Backgammon en cristal de Reflections Copenhagen. Una marca que se preocupa mucho en sus procesos, y en que sus productos duren toda la vida.
Silla Egg™ de Fritz Hansen – Además de producir clásicos daneses, sus procesos se han ido adaptando a los más altos estándares mundiales de producción.
Vaso térmicode Corkcicle – Una gran alternativa al consumo indiscriminado de botellas de plástico.
En 1936, el arquitecto finlandés Alvar Aalto diseñó una de las piezas más importantes del diseño escandinavo: el Tea Trolley 901, un carrito inspirado en la tradición británica del té, así como en la carpintería y arquitectura japonesa. Tanto él como su esposa, la gran diseñadora Aino Aalto, eran conocedores —y admiradores— de estas expresiones culturales.
Su estructura se compone de dos elegantes lazos de láminas de abedul macizo, que sostienen un par de estantes. La plasticidad de este carrito se completa con sus características ruedas dobles. El Tea Trolley 901 se ha producido desde entonces y ha tenido múltiples variaciones. La versión actual es el resultado de años de investigación de la diseñadora Hella Jongerius en los archivos de Artek. La versatilidad de este carrito lo hace ideal, no solo para servir el té, si no como carrito de bar, auxiliar de mesa, para poner tus objetos favoritos e incluso libros.
Alvar Aalto, hijo de un ingeniero forestal, fue uno de los arquitectos modernos más relevantes. Su sensibilidad por la naturaleza se refleja tanto en la manera en que sus edificios se integran en su contexto medioambiental, como en las sinuosas formas de sus diseños.
El Tea Trolley 901 de Artek forma parte de las mejores colecciones de diseño en museos de todo el mundo, junto con otros objetos de este arquitecto y diseñador finlandés. Y ahora lo puedes conseguir en Casa Palacio.