Seguimos con nuestras recetas para disfrutar al aire libre; en esta ocasión, en nuestro taller de cocina aprendimos cómo preparar una carne para lucirnos con una parrillada. Recuerda que las clases son los lunes de 11:30 a 13:00 hrs., martes de 16:00 a 18:00 hrs. y miércoles de 11:30 a 13:00 hrs. en Casa Palacio Antara. El taller es gratuito para tarjetahabientes de El Palacio de Hierro, pero quienes no cuentan con el plástico pueden tomarlo pagando $100.00 por clase. Reserva tu lugar mandando un correo a [email protected]
TACOS DE ASADA A LA CERVEZA
UTENSILIOS
– Uno de los estupendos asadores Génesis ii de Weber
INGREDIENTES
GUARNICIONES
ELABORACIÓN

La Navidad en casa tiene un ritmo distinto. Es el día en que los espacios se habitan sin prisa, cuando el hogar se convierte en refugio y escenario de momentos compartidos. Más que recibir, se trata de vivir la casa junto a quienes le dan sentido.
El 25 de diciembre invita a disfrutar cada rincón con calma. La sala se transforma en punto de encuentro: sillones cómodos, mantas suaves y una iluminación cálida crean el ambiente perfecto para largas conversaciones, risas espontáneas o simplemente estar juntos. Pequeños detalles —cojines, velas, aromas sutiles— aportan confort y refuerzan la sensación de hogar.
El comedor sigue siendo protagonista, aunque ahora desde la informalidad. Un desayuno extendido, una comida sin horarios estrictos, una mesa que se adapta al momento y no al protocolo. La Navidad también es permitir que la casa respire y se acomode a la vida que ocurre dentro de ella.

Los espacios íntimos cobran un valor especial. Un rincón de lectura compartido, música de fondo, juegos de mesa o fotografías familiares que despiertan recuerdos. Todo suma cuando el objetivo es estar presentes.
Vivir la Navidad en casa es reconocer que el verdadero lujo está en compartir el tiempo, en disfrutar los espacios tal como son y en llenarlos de significado. Cuando la casa se vive en familia, cada detalle se convierte en memoria.
La Navidad es el momento ideal para reunirnos alrededor de la mesa y crear recuerdos que perduran. Más allá del menú, una gran mesa navideña habla de cuidado, de detalle y de la alegría de recibir a quienes más queremos.
Para comenzar, define una paleta de colores que unifique todo. Los tonos clásicos —rojo, verde, dorado o blanco— nunca fallan, pero también puedes optar por una mesa más contemporánea en beige, champagne o verdes profundos. El mantel es la base: uno de lino o algodón aporta calidez, mientras que los caminos de mesa ayudan a dar estructura sin recargar.
La vajilla debe ser protagonista, pero no necesariamente recargada. Platos blancos o con detalles sutiles permiten que la comida destaque. Combínalos con copas de cristal y cubiertos bien alineados; estos pequeños gestos transmiten armonía y cuidado. Un tip práctico: coloca el menú pensado con antelación para evitar prisas de último momento y disfrutar más del encuentro.
Los centros de mesa merecen una mención especial. Arreglos bajos con ramas naturales, velas o flores de temporada crean un ambiente íntimo sin obstaculizar la conversación. La iluminación suave, preferentemente con velas o luces cálidas, transforma la mesa en un espacio acogedor.
Finalmente, añade un toque emotivo: una tarjeta con el nombre de cada invitado, un pequeño detalle para llevar a casa o una tradición familiar que se repita cada año. Porque una mesa bien puesta no solo se ve bien, también se siente. Y en Navidad, eso lo es todo. En Casa Palacio te deseamos una muy feliz navidad.
La Navidad es, quizá, la celebración que mejor revela quiénes somos dentro de nuestra propia casa. Es cuando las familias se reúnen alrededor de una mesa que ya tiene su propio relato; cuando los aromas de invierno se mezclan con luces tenues y tejidos cálidos; cuando las elecciones que hacemos durante el año encuentran sentido: la vajilla que reservamos para las ocasiones especiales, el florero que siempre pide flores frescas, la manta suave que invita a sentarse un poco más cerca.
En Casa Palacio pensamos en esos momentos al elegir cada pieza que forma parte de nuestro universo. Valoramos la producción artesanal, la nobleza de los materiales, la belleza de un diseño que envejece bien. Creemos que un objeto bien hecho transforma la experiencia cotidiana y que, en Navidad, esa transformación se vuelve aún más evidente: una mesa sostenida por madera trabajada con paciencia, cristalería que atrapa la luz como si fuera un gesto poético, textiles que suman capas de calidez a un espacio que se vuelve refugio.
Esta temporada queremos celebrar contigo la importancia de vivir rodeados de armonía y significado. Elegir con intención es una forma de cuidado: hacia nosotros, hacia quienes amamos y hacia los espacios que compartimos. Cada pieza seleccionada —una vela artesanal, un juego de cubiertos balanceado, un sillón pensado para conversar sin prisa— acompaña la esencia de estas fechas.
Gracias por permitir que Casa Palacio sea parte de tu hogar y de tus rituales más íntimos.
Que esta Navidad sea una invitación a habitar la belleza, a compartirla y a construir recuerdos que iluminen el año que viene.
La temporada de fiestas invita a reunirnos alrededor de la mesa, compartir sabores especiales y crear momentos que se recuerdan por años. Para inspirar estas celebraciones, Miele presenta una receta perfecta para ocasiones familiares: Rack de Cordero con salsa de Maple y Cilantro, una combinación aromática y sofisticada que resalta aún más gracias a la precisión de sus equipos de cocina.

Este platillo es ideal para colocarse al centro y compartir, convirtiéndose en un gesto cálido y memorable para celebrar la temporada con el sello de calidad Miele.

Parrilla de Inducción Modelo: KM 7740