Platicamos con el Director General del Museo Franz Mayer; espacio dedicado a las artes aplicadas de ayer, pero que hoy, también honra al diseño contemporáneo.
Héctor, ¿cómo llegas al Museo Franz Mayer?
El museo cumplió 25 años… pero yo llegué antes. Tuve el privilegio de ser invitado por quien echó a andar el proyecto, el Mtro. Eugenio Sisto; nos conocimos estudiando la Maestría en Museología. Él era Director de un museo que aún no existía, estaba apenas en conceptualización. Un día me comentó que le habían autorizado un asistente para arrancar el recinto desde cero. Fue una oportunidad única, un privilegio de los que dejan huella.
Sin duda fue un privilegio tomando en cuenta que como Diseñador Industrial que eres, debió ser muy especial ser parte de un museo que alberga una colección de mobiliario y objetos tan importante.
En un principio sí; me gustaba mucho el tema de los objetos por cuestiones familiares: a mi padre le encantaban las antigüedades y compartí con él las idas a La Lagunilla a buscar muebles. Eso me creo una consciencia de los objetos y de la importancia del diseño, pero nunca pensé que el Franz Mayer terminaría siendo un museo dedicado al diseño. Así, aún cuando la temática del recinto son las artes decorativas del México Virreinal, al muy poco tiempo de abrir intuimos que teníamos que presentar exposiciones vinculadas al diseño, porque lo que conocemos como artes aplicadas, los objetos del pasado, es lo que hoy llamamos diseño industrial. La primera muestra de diseño que realizamos nos hizo además darnos cuenta de que era una forma de abrir el museo a otra expresión y sobre todo a otros públicos.
En el diseño industrial que se hace actualmente en México, ¿sobreviven rasgos de la tradición virreinal?
No siempre. Hay que pensar que continuamente las culturas están intercambiando información; por ejemplo, cuando algunos ceramistas introdujeron la cerámica de alta temperatura –una técnica no propia del país– fueron muy criticados pese que al estar trabajada con manos mexicanas terminó siendo local. Muchos de los ceramistas mexicanos actuales, en el extranjero son percibidos como creadores con una gran identidad.
¿Qué rasgos caracterizan a esa identidad?
Muchas cosas: no nos damos cuenta, pero algunos de los platones que vemos en las Bienales, quizás no están hechos en materiales tradicionales, pero hay formas que se siguen haciendo, decorados que te vinculan a nuestro pasado, nuestros orígenes y no hablo de grecas o elementos prehispánicos. En la talavera, por ejemplo, muchas de las fábricas que sobreviven siguen haciendo piezas tradicionales, lo que es muy bueno, pero hay quienes se atreven a hacer otros decorados o bien o tomar los tradicionales pero aplicados de manera contemporánea; ahí es cuando se da este diálogo entre el pasado y el presente.
Héctor Rivero Borrell es Diseñador Industrial y Maestro en Museología.
El museo Franz Mayer se ubica en:
Hidalgo 45. Centro Histórico
D.F. Tel. 5518.2266
franzmayer.org.mx
El Museo Franz Mayer presenta 1001 rostros de México. Máscaras de la colección Ruth D. Lechuga, una exposición que revela la riqueza cultural del país a través de una cuidada selección de piezas tradicionales. La muestra reúne alrededor de cien máscaras provenientes del vasto acervo que Lechuga, coleccionista y etnógrafa, reunió entre 1944 y 1999 durante sus viajes por México.
Tlacololero, Nahua, Madera tallada y pintada,
1980, Petlacala, Guerrero
A lo largo de cinco décadas, Lechuga adquirió máscaras directamente de mascareros y danzantes, documentando con su cámara las tradiciones que las acompañaban. Las piezas expuestas, elaboradas en madera, latón, telas, pieles y caparazones, reflejan la diversidad ritual y simbólica del arte popular mexicano. Algunas fueron usadas en danzas propiciatorias para pedir lluvias o buenas cosechas; otras representan animales, personajes festivos o figuras míticas.
Sirena, Mader tallada y pintada, 1974, Guerrero
En Casa Palacio, admiramos el arte popular por su creatividad, belleza y profunda carga cultural. Su riqueza estética y artesanal es una fuente constante de inspiración para el mundo del diseño. Estamos seguros de que esta exposición te cautivará tanto como a nosotros.
Lagarto, Nahua, Madera tallada y pintada, Bandolero Mendoza, 1981, Chapa, Guerrero
Este fin de semana se inauguró una de las exposiciones más esperadas de 2025 en el Museo Franz Mayer: Antonio: Moda Indomable, una retrospectiva sobre la fascinante obra del diseñador, ilustrador y fotógrafo de moda Antonio López.
Joanne Landis, Revista The New York Times, 1967 © The State of Antonio Lopez and Juan Ramos
Diario Visual, 30 de enero de 1978 ©The State of Antonio Lopez and Juan Ramos
Nacido en San Juan, Puerto Rico, en 1943, Antonio estudió ilustración en Nueva York y, muy pronto, de la mano de su compañero creativo, Juan Ramos, comenzó a publicar su trabajo en revistas como Vogue, Interview, Harper’s Bazaar y Elle, estableciendo una estrecha relación de trabajo con Karl Lagerfeld, además de colaborar con otros grandes nombres de la moda como Halston, Missoni y Versace.
Paloma Picasso, Revista Elle Francia, 1973 ©The State of Antonio Lopez and Juan Ramos
El verdadero rojo… Revista Harper’s Bazaar, 1965 © The State of Antonio Lopez and Juan Ramos
La muestra en el Museo Franz Mayer reúne 460 piezas, entre fotos, ilustraciones, pinturas y objetos de moda del archivo de López y Ramos, e incluso obras de Andy Warhol. Antonio López falleció en 1987 a los 44 años. Fue un artista que supo capturar el espíritu de los años 60, 70 y 80, considerado un verdadero revolucionario de la ilustración de moda, además de retratar la noche y los personajes del Nueva York de esa época. Antonio: Moda Indomable estará abierta hasta el 29 de junio.
Autorretrato para Missoni, 1983 © The State of Antonio Lopez and Juan Ramos
En la Amazonía y la Tierra Indígena del Xingú, en Brasil, habitan varios grupos de pueblos originarios, cada uno con su propia identidad y cosmovisión del mundo, aunque todos marcados por su entorno: el bosque tropical. Estos grupos poseen saberes ancestrales que se transmiten de una a otra, y que nosotros hoy podemos descubrir, en el Franz Mayer, en una pieza tan cotidiana como… un banco.
Los bancos que conforman la exhibición fueron tallados en madera por artistas indígenas de 41 grupos humanos. Se trata de piezas únicas que llevan las marcas de identidad tanto del grupo de procedencia como del artista que las creó. Cada banco refleja la cosmovisión de la comunidad, mostrando una diversidad de estilos, motivos y significados que abarcan desde lo ceremonial hasta lo cotidiano.
Antes de su presentación en el Museo Franz Mayer, esta muestra se presentó en el John F. Kennedy Center for the Performing Arts (Washington, D. C., EE. UU.) y en Casa de América (Madrid, España).
Sin duda, una exposición obligada para los apasionados del mueble. Recuerda: solo tienes hasta enero 26 para visitarla.
Hidalgo 45, Centro Histórico. De mar. a dom. de 10:00 a 17:00 hrs.
Es momento de acudir a nuestra cita anual con lo mejor del fotoperiodismo y la fotografía documental. Como cada año, los ganadores del concurso World Press Photo nos invitan a detenernos por un momento para mirar con atención las imágenes que congelan en el tiempo las historias que ocurren en el mundo.
La guerra, la migración y el cambio climático son, tristemente, los grandes protagonistas del World Press Photo, pero también hay espacio para la naturaleza, el deporte y la inventiva humana. Por cierto, México tiene un papel destacado: el español Jaime Rojo, fotógrafo de National Geographic realizó un fotorreportaje sobre la migración de la mariposa monarca y los esfuerzos para conservarlas.
No te pierdas esta edición: solo tienes hasta el 25 de agosto para visitarla. Como siempre, la cita es en el museo Franz Mayer.
Hidalgo 45, Centro Histórico. De mar. a dom. de 10:00 a 17:00 hrs.