Cuenta la leyenda que un pastor en las montañas de Etiopía notó que sus cabras estaban especialmente activas tras comer los frutos rojos de un arbusto. Intrigado, llevó la planta a un monasterio cercano. Los monjes descubrieron que infusionar sus semillas no solo los mantenía despiertos durante la oración nocturna, sino que también despertaba la […]