Se dice que este platillo fue inventando por un pastor que estaba cansando de comer queso duro, por lo que decidió derretirlo para untarlo en pan y tener comida caliente para calmar el frío del invierno alpino. Lo que no queda claro es la nacionalidad del creador puesto que dos países se disputan su origen: Francia y Suiza. Sin importar esto, es un hecho que el plato ha conquistado al mundo y preparar un fondue, es un excelente pretexto para invitar a los amigos.
La receta tradicional es muy sencilla, sin embargo nosotros te proponemos dos giros interesantes. Un consejo: recuerda que el pincho de dos dientes es para pan o frutas, mientras que el de tres se usa para carne.
FONDUE AL CHAMPÁN
INGREDIENTES
½ diente de ajo
400 gr de queso emmental
300 gr gruyere
1 vaso de champaña o cava extra seco
2 cdts. de fécula de maíz
1 baguette cortada en cuadritos
PREPARACIÓN
1 Antes que nada, frota con el ajo el interior de la olla en la que vas a preparar el fondue.
2 Coloca dentro de la olla todos los ingredientes, mézclalos muy bien y pon a fuego lento. Hay que mover la mezcla haciendo “ochos” y no en forma circular para que el fondue adquiera una consistencia cremosa.
3 Prende la hornilla que va debajo del cazo del kit para servir fondue. El fuego debe ser bajo para no quemar la mezcla.
4 Enseguida vierte el queso en el cazo de la fondue. Cuando introduzcas el pincho para bañar con queso el pan, aprovecha para revolver un poco la mezcla.
FONDUE BOURGUIGNON
INGREDIENTES
– 1 K de carne cortada en cuadros
– 3 dientes de ajo
– 2 hojas de laurel
– Pimentón rojo
– Pimienta negra molida
– Tomillo
– Romero
– Orégano
– Vinagre
– Aceite de oliva virgen
– Sal
PREPARACIÓN
1 Coloca la carne en un recipiente amplio y agrega un poco de pimentón dulce, tomillo, romero, orégano, los ajos pelados y picados, sal y pimienta negra molida. Mezcla.
2 Agrega un chorrito de vinagre, del tipo que más te guste y mezcla de nuevo para que la carne se impregne con todos los ingredientes.
3 Deja marinar en el refrigerador por 6 horas.
4 Para comer la carne, llena tres cuartas partes de la fondue con aceite de oliva virgen y ponla a calentar a fuego alto. Cuando el aceite esté bien caliente baja la temperatura (el aceite no debe hervir) y pincha los trozos de carne para meterlos al aceite. Cocínalos hasta que obtengan el término que más te guste. Puedes remojarlos en una salsa como alioli o tártara.
Ubicado en la interesantísima colona San Rafael, el Museo Experimental el Eco es uno de los espacios culturales más singulares del país. Fue concebido en 1953 por el artista y arquitecto Mathias Goeritz como un manifiesto de su teoría de la “arquitectura emocional”, en colaboración con el entonces joven arquitecto Luis Barragán. Su objetivo: crear un espacio que provocara emociones, lejos de las normas del funcionalismo moderno.
Más que un museo, el Eco es una escultura habitable. Su diseño irregular, muros inclinados y patios inesperados rompen con cualquier noción convencional del espacio expositivo. Incluso la emblemática jacaranda en el exterior exterior —que en estos momentos esta en flor— se integra como parte esencial del recorrido sensorial que propone el lugar.
Goeritz, figura clave del arte moderno en México, dejó un legado que va más allá de el Eco. Sus vitrales en la Catedral Metropolitana, la Ruta de la Amistad, las torres de Satélite en colaboración con Barragán, o la famosa Serpiente de el Eco son prueba de su profunda conexión entre arte, entorno y espiritualidad. Su pensamiento y obra —profundamente estética, espiritual y libre— han sido una fuente constante de inspiración para Casa Palacio, en donde también entendemos el diseño como una experiencia emocional.
En esta Semana Santa, te invitamos a redescubrir uno de los lugares más visionarios de la ciudad. Una visita a el Eco no es solo un paseo por un museo: es una inmersión en un espacio donde el arte, la arquitectura y la emoción convergen.
Museo experimental el Eco, Sullivan 43, Col. San Rafael,
Ciudad de Mexico, CP 06470
En Casa Palacio nos apasiona todo lo que hacemos. Cada una de nuestras secciones tiene un lugar muy especial: son el resultado de mucha dedicación, gusto y trabajo. Pero, sin duda, una de nuestras consentidas es la mesa. Basta ver nuestra selección de platos, manteles, vasos y… cubiertos. Sí, los cubiertos nos fascinan.
En la mesa, los cubiertos no son solo herramientas: son parte de un lenguaje no verbal que revela educación, seguridad y atención al detalle. Emily Post lo dijo a mediados del siglo XX: “Los modales no se tratan del tenedor correcto, sino de tener consideración por los demás”. Sin embargo, conocer el uso adecuado de cada cubierto puede evitar momentos incómodos y, sobre todo, transmitir elegancia sin esfuerzo.
La regla básica sigue vigente: se come de afuera hacia adentro. Los cubiertos más alejados del plato (como los de la entrada o el pescado) se usan primero, y se avanza hacia los más cercanos al plato principal. El tenedor siempre va a la izquierda del plato, y el cuchillo a la derecha, con el filo hacia adentro.
El protocolo distingue dos estilos principales:
– Estilo americano: se corta la comida con cuchillo en la mano derecha y tenedor en la izquierda, pero luego se cambia el tenedor a la mano derecha para llevar la comida a la boca.
– Estilo europeo o continental: el tenedor permanece en la mano izquierda durante toda la comida. Este último se considera más fluido y elegante.
Qué errores evitar: señalar con el cuchillo o empuñar el tenedor como si fuera una herramienta de jardín.
Saber usar los cubiertos es como hablar un idioma sofisticado sin palabras. Y como todo lenguaje, se aprende, se practica y se disfruta. Porque, al final, la etiqueta no se trata de rigidez, sino de hacer sentir cómodos a los demás —y a uno mismo— en cualquier mesa. Te hemos preparado una selección de algunas de nuestras piezas favoritas de Casa Palacio.
Set de cubiertos de Jean Dubost Laguiole
Set de cubiertos Atria en acero inoxidable de WMF
Set de cubiertos Regata en acero inoxidable de Marine Business
El Museo Franz Mayer presenta 1001 rostros de México. Máscaras de la colección Ruth D. Lechuga, una exposición que revela la riqueza cultural del país a través de una cuidada selección de piezas tradicionales. La muestra reúne alrededor de cien máscaras provenientes del vasto acervo que Lechuga, coleccionista y etnógrafa, reunió entre 1944 y 1999 durante sus viajes por México.
Tlacololero, Nahua, Madera tallada y pintada,
1980, Petlacala, Guerrero
A lo largo de cinco décadas, Lechuga adquirió máscaras directamente de mascareros y danzantes, documentando con su cámara las tradiciones que las acompañaban. Las piezas expuestas, elaboradas en madera, latón, telas, pieles y caparazones, reflejan la diversidad ritual y simbólica del arte popular mexicano. Algunas fueron usadas en danzas propiciatorias para pedir lluvias o buenas cosechas; otras representan animales, personajes festivos o figuras míticas.
Sirena, Mader tallada y pintada, 1974, Guerrero
En Casa Palacio, admiramos el arte popular por su creatividad, belleza y profunda carga cultural. Su riqueza estética y artesanal es una fuente constante de inspiración para el mundo del diseño. Estamos seguros de que esta exposición te cautivará tanto como a nosotros.
Lagarto, Nahua, Madera tallada y pintada, Bandolero Mendoza, 1981, Chapa, Guerrero
Por primera vez, la National Gallery de Londres presenta una exposición dedicada a un artista latinoamericano histórico: el gran paisajista mexicano José María Velasco. La muestra, A View of Mexico, celebra su maestría para capturar la identidad de México a través de sus imponentes paisajes.
Velasco convirtió el Valle de México en un símbolo. Sus vistas panorámicas, con los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl como telón de fondo, no solo retratan la geografía, sino que evocan un territorio mítico. En sus pinturas, la naturaleza convive con la modernidad naciente: vías de tren, puentes y fábricas que reflejan la industrialización del siglo XIX. Su precisión científica —inspirada en la botánica y la geología— aporta un realismo casi documental, sin perder su carga poética.
La exposición no solo celebra a uno de los grandes del arte mexicano, sino que marca la primera vez que la National Gallery exhibe a un pintor latinoamericano histórico, coincidiendo con el 200 aniversario de las relaciones diplomáticas entre México y el Reino Unido.
Esta muestra representa una oportunidad única para que el público extranjero descubra cómo Velasco, a través de su mirada, convirtió el paisaje mexicano en un emblema de identidad nacional.
José María Velasco: A View of Mexico The National Gallery, Londres, del 29 de marzo al 17 de agosto de 2025