“Todos mis proyectos están pensados y concebidos para encajar en la ciudad -es mi meta última- , que hermanen con el edificio, dialoguen con el entorno. Es más, que el espacio público penetre en mis edificios. Hay muchos casos en que hago pórticos para que el espacio público sea parte del edificio”. Esto dijo el arquitecto Teodoro González de León durante la inauguración de “Maquetas”, exposición que se encuentra en el Museo de la Ciudad de México, y con la que la capital celebra su influencia en la conformación del actual paisaje urbano, además de festejar que el próximo 28 de mayo cumple 90 años.
No se trata de un festejo menor, estamos hablando de un arquitecto cuyas obras son parte de la identidad capitalina y referente obligado para sus habitantes. Simplemente es imposible pensar en la ciudad sin remitirnos a construcciones como el Museo Rufino Tamayo, el Auditorio Nacional, el icónico edificio conocido como “el pantalón” en Bosques de las Lomas, o el Museo del Niño, entre otras.
Para descubrir su evolución como arquitecto y tener una nueva perspectiva de sus edificios, la muestra reúne 55 maquetas seleccionadas por el propio Teodoro. Pero, ¿por qué son importantes estas maquetas? El mismo González de León nos da la clave al explicar que son una parte fundamental de su proceso creativo: “en el fondo de mi cerebro surge una imagen tridimensional que pesco de inmediato y hago una pequeña nota. Es importantísimo tratar esa imagen, no dejar que se borre, hacer una maqueta chica, en cartón, con las manos. Comenzar a jugar su tridimensionalidad y ver si respondió a todas las pruebas, cualquier cosa que falle, otra vez, otra maqueta sobre la misma. Así empieza un proceso de creaciones a base de prueba y error; un proceso largo y penoso, hasta que se logra una maqueta que cumple con todo”.
Sin duda, esta exposición no solo es para los amantes de la arquitectura, sino también para los apasionados de la CDMX.
MAQUETAS
Museo de la Ciudad de México
Pino Suárez 30, Centro Histórico.
Hasta el 29 de mayo.
De martes a domingos de 10:00 a 18:00hrs.
En Casa Palacio, cada mesa es un escenario y cada vajilla, una invitación a la experiencia. La nueva selección de Costa Nova transforma la manera de vivir y presentar los alimentos, combinando diseño, tradición y una elegancia natural que se percibe al instante. Desde las curvas orgánicas de Livia, pasando por los matices oceánicos de Brisa, hasta la sofisticación atemporal de Pearl, cada colección habla de Portugal, de su cultura y de la maestría artesanal que convierte cada pieza en un verdadero protagonista de la mesa.
Con formas suaves y esmaltes contrastantes, Livia es la colección más versátil de Costa Nova. Su versión en negro mate, con sutiles irregularidades que hacen única cada pieza, es especialmente apreciada por quienes aman el diseño con carácter. Desde platos planos y hondos hasta bowls, fuentes y tazas, es una vajilla completa que se adapta tanto a un desayuno cotidiano como a una cena sofisticada.
Inspirada en la brisa cálida que recorre el Algarve y en el movimiento suave del Atlántico, Brisa combina el blanco con matices de azul que evocan las olas rompiendo en la orilla. Sus formas orgánicas y el esmaltado artesanal le dan un aire relajado pero elegante, ideal para quienes buscan capturar la esencia del verano portugués todo el año.
Con un diseño que homenajea la cerámica europea de los siglos XVIII y XIX, Pearl combina tradición y modernidad en piezas que se sienten atemporales y contemporáneas al mismo tiempo. Sus bordes con delicadas perlas en relieve y su amplia gama —platos, bowls, bandejas, fuentes y piezas de té o café— permiten crear desde mesas formales hasta composiciones más casuales, siempre con un toque sofisticado.
Parte del encanto de Costa Nova está en su respeto por el oficio. Cada pieza nace de un proceso donde la tecnología se mezcla con el trabajo manual, y donde los recursos naturales se aprovechan de forma responsable. El resultado: cerámica de alta resistencia, ecológica, única y con una identidad profundamente portuguesa.
Descubre más sobre Costa Nova, y todas sus colecciones en nuestras tiendas Casa Palacio y deja que el gres portugués transforme tu manera de poner la mesa.
La Ciudad de México celebra el diseño. Design Week México 2025 acaba de inaugurar su 17ª edición bajo el lema “Diseñado en México”, consolidándose como una de las citas más esperadas del calendario cultural y creativo del país. Este fin de semana, la capital vibra con exposiciones, recorridos y experiencias que revelan el talento, la innovación y la diversidad del diseño nacional.
Entre sus imperdibles, destacan los Tours de Diseño, una invitación a recorrer estudios, talleres y showrooms que muestran lo mejor del diseño contemporáneo mexicano. Cada parada es una ventana a nuevas ideas, procesos y materiales que están transformando la manera en que concebimos los espacios y los objetos que nos rodean.
Otro punto esencial es Design House 2025, ubicada en Sierra Nevada 355, donde los despachos más reconocidos del país transforman una residencia en un laboratorio de creatividad. En esta edición, Casa Palacio, en colaboración con Elena Talavera, presenta Mesana Medaña, un proyecto que habita la historia de la casa a través del color y la luz. Su propuesta destaca por el equilibrio entre lo emocional y lo sereno: un diálogo entre lo interior y lo exterior que invita a contemplar y sentir.
Fotografía: Denis Borovskikh
Design Week México continúa abierta hasta el 2 de noviembre con exposiciones como Inédito, Visión y Tradición en el Museo Nacional de Antropología, y Diseño Contenido en el Parque Lincoln. Una oportunidad única para descubrir cómo el diseño —hecho en México— sigue inspirando, conectando y transformando.
Consulta el programa completo en designweekmexico.com y visita Design House para conocer el espacio de Casa Palacio y Elena Talavera.
En el marco de Design Week México 2025, Casa Palacio participa en Design House con una colaboración junto a Elena Talavera, quien presenta Mesana Medaña: una propuesta que parte del diálogo entre la arquitectura existente y la mirada contemporánea. En lugar de borrar lo que la casa ya contaba, Talavera —en colaboración con Casa Palacio— decide habitar su historia, reinterpretarla y darle nueva voz a través del color y la luz.
Gabinete bar Shimmer de Timothy Oulton
En el interior de la casa, un gran vitral colorea la luz con tonos que cambian a lo largo del día, tiñendo los muros y el mobiliario con una calidez envolvente. Este ámbito interior seduce con su riqueza visual y su atmósfera intensa, donde cada reflejo invita al deleite y a la inmediatez. En contraste, el espacio exterior ofrece un respiro: un espacio de contemplación y equilibrio, donde la luz se expande con serenidad y la transparencia se convierte en materia de calma. Entre ambos mundos, la diseñadora traza unas franjas naranjas que recorren el espacio y lo unifican, actuando como un hilo conductor entre la emoción y la quietud.
Mesa auxiliar Xylem Burntwood de Timothy Oulton
Vajilla Signum de Swarovski x Rosenthal
Mesa comedor Ralston de Arteriors
Bócina inalámbrica Hiend de Marantz
Cada pieza seleccionada junto a Casa Palacio acentúa ese equilibrio: las mesas auxiliares Spur Burntwood y Xylem Burntwood de Timothy Oulton, la mesa de comedor Ralston y la lámpara colgante Chester de Arteriors, el bowl Melon y el plato Corve Natural de Bordallo Pinheiro, la vajilla Signum de Swarovski x Rosenthal y la bocina inalámbrica Hiend de Marantz -un nuevo estándar en el audio de alta fidelidad-.
Lámpara Chester de Arteriors
Bowl Melón de Bordallo Pinheiro
Lejos de ser una simple intervención, esta colaboración entre Casa Palacio y Elena Talavera es ante todo un ejercicio de diseño: un proyecto que explora cómo la luz, el color y la materia pueden dialogar con la arquitectura existente para revelar nuevas emociones. Una casa que respira con la luz, donde el color une lo que contrasta y cada objeto encuentra su lugar en el equilibrio.
Del 9 de octubre al 2 de noviembre, Design House 2025 abre sus puertas para revelar que el verdadero lujo no está en lo que se ve, sino en cómo la luz —y el diseño— nos transforma. Te invitamos a descubrir las piezas que forman parte de esta propuesta en nuestras tiendas Casa Palacio.
*Fotografía: Denis Borovskikh
Recibir en casa es mucho más que poner la mesa: es crear una experiencia. En el arte de recibir, cada detalle cuenta. La vajilla, la cristalería, la iluminación y hasta el aroma del ambiente hablan de nosotros y de la historia que queremos compartir con nuestros invitados.
El primer paso para una mesa elegante y funcional es definir el ambiente. Si buscas un efecto cálido y otoñal, apuesta por tonos tierra, dorados suaves o verdes profundos. Los textiles —manteles, servilletas o caminos de mesa— aportan textura y confort visual.
Después, la vajilla se convierte en protagonista. Combinar estilos puede ser un acierto: lo importante es mantener una armonía de materiales y color.
La cristalería y los cubiertos completan la composición. Una copa tallada o un vaso de cristal color ámbar reflejan la luz y añaden profundidad a la escena. No olvides un detalle clave: las velas o lámparas bajas que bañen la mesa en una luz cálida y envolvente.
En Casa Palacio encontrarás todo lo necesario para transformar cada comida en un acto de hospitalidad y estilo. Porque, al final, una mesa bien puesta no solo recibe a los demás: también celebra el arte de vivir.